En direcciones contrarias continúa la realidad económica de Estados Unidos y Puerto Rico, el primero con una mejora en la perspectiva de su deuda, según anunció hoy Standard & Poor’s, y el segundo con la incertidumbre ante la posibilidad de otra degradación de su ya maltrecho crédito.
A Estados Unidos se le señala una mejoría en la fortaleza de su economía, aunque todavía enfrenta significativos retos, principalmente en la creación de empleos, la atención de su situación fiscal y su alto nivel de deuda externa.
En términos generales S&P ve signos de que la mejoría en Estados Unidos deberá sostenerse en los próximos años.
Por el lado de Puerto Rico, la expectativa cada vez es mayor sobre la posibilidad de que el crédito llegue al nivel de grado especulativo, para lo cual apenas le falta bajar un peldaño.
La incertidumbre sobre qué hará el gobierno de la Isla para lograr la entrada suficiente de dinero también aumenta a medida que se acerca la fecha del 30 de junio, cuando termina el año fiscal y todavía no está claro de dónde y cómo se completará el nuevo presupuesto de $9,635 millones. El gobierno espera tener el cuadro claro esta semana.
Mientras tanto, diferentes analistas de las principales publicaciones y del mercado de bonos municipales de Nueva York, han planteado reiteradamente su preocupación sobre el estado económico de Puerto Rico, y el mensaje a los inversores es tener mucho cuidado. De hecho, tan reciente como la semana pasada, la llamada “Reina de Wall Street”, Alexandra Lebenthal, recomendó a los inversionistas a permanecer alejados de los bonos locales. Lebenthal es la principal oficial ejecutiva de Lebenthal & Co., una firma especializada en el mercado exento de bonos municipales.
Richard Larkin, director de análisis de crédito en HJ Sims & Co Inc., fue citado por la publicación Reuters, al decir que no cree que el crédito de Puerto Rico deba ser rebajado, pero aclaró que “mi instinto me dice que va a ser”. Señaló que a las agencias clasificadoras como Moody’s, Fitch y S&P les preocupa que Puerto Rico no elimine su déficit en el presupuesto que vence en tres semanas y por lo tanto deberá extenderse.
Reuters también cita a Alan Schankel, gerente de Janney Capital Markets, quien opinó que si las propuestas del gobierno no producen los recaudos esperados, esto mantendrá el desequilibrio presupuestario y podría llegar la rebaja en el crédito.
La casa de inversiones UBS, en su informe Municipal Market Guide, también analizó la crisis de Puerto Rico y dijo que “creemos que hay la probabilidad de que una o mas agencias acreditadoras revisen la nota de las Obligaciones Generales (GO’s, por sus siglas en ingles) antes de que termine el año”. Ante esto, recomendó que “los inversores deben estar preparados para tal resultado”.